Wednesday, January 30, 2008

The Soccer Match (El Fósforo de Fútbol)


Dame una Q, Q!, dame una U, U!, dame una I, I!, y así sustantivamente. ¿¿¿Que nos queda??? ¡¡¡QUICOAVENTURAS!!! Si si, esta Quicoaventura empieza así: Resulta que el otro día me levanté con fiaca, y no quería hacer nada. Así que no hice nada.

Chauuu. Hasta la próxima Quicoaventuuuura!

¡Epa!....que cagazo! No, la verdad de la milansa es que me invitaron a jugar un picadito. Estaba con mi bata en casa, tomando un rico Nesquick y viendo "Los Bañeros más locos del mundo", cuando me llama por télefono el mismisimo Cuervo. "Cueeervo...que hacés!", "acá andamos, hoy vino Victor Sueiro y trajo una Cheese Cake, la pasamos bien" "me alegro mucho, mandale saludos" "Le mando. Che, estamos organizando un picadito para hoy a la tarde, te prendés?" "¡Como una lamparita Cuervito!, ¡decime donde!", "Allá abajo, traté de buscar una que te quedara cerca, pero va a ser en la cancha esa que te queda re lejos" "Ah, en la cancha de la lora, bueno, está bien".

Me calcé un jogging, (no me gusta jugar de pantalones cortos, porque así es como estaba siempre en la vecindad y llegué a odiarlo), y me fui a jugar. Cuando llegué lo ví al maraca de Scream, que ya de entrada me miró mal. Me la tiene jurada desde hace rato, de una vez que le frustré un asesinato haciéndole una toma de judo. En mi equipo estaban El Cuervo, un flaco con un antifaz, y el cowboy de las propagandas de Marlboro que pidió que protejamos su identidad (no te preocupes JHON ATKINS, cedula nro: 11.214.289, pusimos un cartelito de censurado!), también estaba Javier Mascherano que jugó con la casaca de Boca porque nos confensó que es de boca, también nos pidió que no se entere nadie (No te preocupes Javi, ¡te tapamos la cara!). También había una gitana a la que también le tapamos la cara pero porque era horrible.

El partido empezó bien. Nuestro equipo fauleaba a morir y el equipo contrario no podía acercarse a nuestra área sin quedar hemiplegicos o con fracturas expuestas (es que me parece que el Cuervo se había empastillado, no pasaba el antidoping ni coimeando).

La cosa se pudrió cuando Scream pasa por al lado mío y me dice en voz baja: "¿te tuviste que ir no? El Chavo te surtía mucho no?, seguro en este mismísimo momento debe estar dándole bomba a Paty" ¡¡¡Paaaara que!!! le bajé el comedor, la cocina y el living de un derechazo. Entonces el muñeco Mateiko (que jugaba para el equipo de Scream) se me vino encima. Hizo el gesto de que se arremangaba para pegarme (pero en realidad ya estaba arremangado), y cuando Mateiko me estaba por calzar vino de atrás el cowboy de Marlboro y le gritó "fijáte que el calzado que sea su numero, que sino después le aprietan los piecitos". Con Mateiko nos quedamos mirándolo mientras nos decía con voz de balinazo "¿que pasa? ¿se creen que porque uno actúa de macho recio para una propaganda tiene que ser así siempre? no no mis chiquis, no se equivoquen" y me tiró un besito. ¡Brrr!......que miedito. Mateiko ya se estaba acordando de pegarme pero por suerte venía corriendo de atrás El Cuervo totalmente endrogado y le hizo una tijera a la nuca volteando a Mateiko como en la propaganda de Sibarita. Enseguida Javier Mascherano nos grita "Che, delen bolú, terminemos el partido en paz". Decidimos hacer las paces y seguimos jugando.

Todo iba bien, seguíamos fauleando a lo Giunta, pero en un momento El Cuervo no dió más y vomitó en plena cancha. Mateiko que venía embaladísimo para chutar (si, dije chutar), se resbala con el vomito y da 3 vueltas en el aire cayendo en brazos del Cowboy de Marlboro. "¡Uuuuy! ¡regalito del cielo!" dice el bala y empieza a moverse como Emilio Disi en la pelicula que estaba viendo antes de que me invitaran al picadito.

En eso llega la vieja que nos alquila la cancha y grita: "uuuultimo goooool". ¡La puta madre! el partido estaba empatado y era un excitante "gol gana". Con toda la tensión acumulada durante el partido empezamos a luchar por convertir (si, dije convertir) el último gol. El cuervo saca desde abajo y totalmente empastillado se corre toda la cancha de punta a punta, esquivando, gambeteando, saltando con la bocha y abriéndose paso entre los del otro equipo. Al llegar le meten una pierna y se estira llegando a rozar el esférico (si, dije esférico) con la mano y haciendo un histórico gol.

"¡¡Mano mano!!, ¡maaaano la puta maaaadree!!!" gritaban desaforados Mateiko, Scream y el resto del equipo. El Cuervo festejaba, hacía el avioncito, la hamaquita de Saviola, el topo Giggio de Riquelme, la naranja mécanica de Kúbric, la totora de cabito, etc...

A todo esto el referí, (si, había referí, pero hasta entonces había estado fumádose un ketts y mirando una propaganda de Reduce Fat Fast), se levanta y dice: "ese gol no valió, fue hecho con la mano. A Maradona puede ser…pero a vos quien te juna?"

El Cuervo hace PLOP! y se cae para atrás como Condorito.

Quico aconseja: Decile NO a las drogas. Total, ¿cuando una droga te va a preguntar algo?

Monday, November 06, 2006

La cita misteriosa


Guats ap mensos! si...si...sé que muchos se preguntarán donde estuve todo este tiempo. ¿Quizá perdido en una selva centroamericana a punto de ser devorado por caníbales con nombres como “Chiche” o “Gelblumg”?, ¿quizá en medio de una guerra de tizas en un secundario de Longchamps?. ¿Tal vez fumándome un diario “La Nación” en las Bahamas?, ¿Acaso apretando el pomo antes de carnaval?? NO! La verdad es que estuve viendo un campeonato de balero por ESPN, no parece gran cosa, pero tendrían que haber visto al que perdió, yendose enojado con una soguita que le colgaba del ojete... Pasó algo verdaderamente extraño en mi vida en este tiempo, algo terrible. Estaba yo tranquilo en mi casa, entregado a la genial tarea de hablarle a un potus, cuando recibo un llamado de México por cobrar. Zas! Dije, otra vez el chavo que llama para joder...

-Hola! ¿Que mierda querés pelotudazo? –dije sin darle tiempo a nada.

-FEDERIIIIIICO! –se escuchó al otro lado del tubo.

-¿mami?

-¡Por supuesto! ¿Que es ese lenguaje soez? Acaso nada te ha enseñado el profesor “Longaniiiiiza” –dijo mi madre acentuando demasiado la palabra “Longaniza”.

-Jirafales madre, profesor Jirafales....

-Si...si...claro claro...Jirafales, jeje...En fin, te llamo para que hagas lo siguiente, tú solo sigue mis instrucciones: Ve a Alvear 3467 en el barrio de Belgrano y pregunta por el Sr. Mortensen. Una vez allí, haz todo lo que él te diga. Luego de pronunciar esas palabras, cortó. Sentí que algo muy malo estaba a punto de suceder. Pero decidí hacerle caso a las instrucciones de la vieja chancluda. Al día siguiente me levante con el Alba, yo no sabía que era un travesti, el/ella solo me dijo que se llamaba Alba y que cobraba $50. En fin, la/lo despedí y le dije que la próxima avise. Comencé mi camino. Era un día excelente. Una leve brisa movía algunas hojas del otoño, de pronto, una bolsa comenzó a danzar con el viento y las hojas. La bolsa danzaba en el aire y no pude soportar tanta belleza, me senté en la calle y comencé a llorar en medio de la gente, hasta que una señora pasó, sintió lastima y me dio 75 centavos. Genial! Ya tenía para el bondi.

Cuando llegué al lugar sentí nauseas, un sorete chirlo de perro se derretía en la vereda de aquel lugar. Entré con algo de miedo y ganas de vomitar. Una chica con cara de “me quiero ir a mi casa a ver 12 corazones Gay” me preguntó a quién venía a ver. Pregunté por el Sr. Mortensen. La chica me hizo firmar unos papeles misteriosos que no leí porque de cerca no veo nada, pero yo los firmé con cara de pókemon. Una vez firmado los papeles, me pidió que la siguiera a través de un pasillo muy blanco, con extrañas luces tubulares, como se ven en las abducciones extraterrestres. Llegamos a una puerta marrón, ella golpeó tres veces, me dijo “Suerte” y se fue. Un escalofrío me corrió por la cremallera. “Suerte”, ¿para qué necesitaba yo “Suerte”?, estaba a punto de salir corriendo de allí, cuando una voz al otro lado de la puerta dijo: “Adelante”.

Entré con el rabo entre las piernas, como el perro arrepentido, con su mirada tan tierna, con el hocico partido, con el rabo entre las piernas, vuelve el perro arrepentido, con su mirada tan tierna, con el hocico partido, con su mirada tan tierna, con el rabo entre las piernas....Ahh! ya callate callate caaaaallate que me desesperas! (lapsus).

En fin. El hombre estaba allí, escribiendo algo en un block de hojas sin darme mayor importancia. Por un segundo desee que apareciera el Chapulin Colorado y que me sacará de ahí.

El Sr Mortensen me preguntó si yo comía mucha grasa mientras me pesaba en una vieja balanza. "Todo esto es muy extraño" pensé. "Quizá quieran matarme por encargo para darle mis órganos a alguien".

"¡No lo permitiré! ¡Nadie tocara mis Yamahas!. ¡¡¡Muere maldito!!!" Grité a viva voz mientras le partía un florero en la cabeza al tipo ese. Lo último que recuerdo de esa escena, es que unos hombres vestidos de verde entraron y me clavaron algo en el brazo. Luego mis ojos se cerraron, y cuando volví a abrirlos me encontraba en una camilla junto a una enfermera que me miraba y movía su cabeza hacia los lados con cara de: "Que pelotudo".

Días más tarde hable con la vieja chancluda. Me explicó que ella solo quiso que vaya al Nutricionista, que no me deje estar, le parecía que debía tener el colesterol alto de tanto comer en "Mostaza" (Las hamburguesas más grandes).

Ayer llamaron del hospital Argerich, el Dr Mortensen se recupera paulatinamente, parece que la fractura de cráneo está sellando. Bueno. Eso es todo amigos. Y ya saben, no me manden mails porque me ocupan la casilla y no me llega toda la pornografía asiática a la que estoy suscrito.

Silla!

Quico Aconseja: Si vas a parís, visitá la torre Eiffel.

P.D: Ah, ¿la foto? No sé, estaba del culo cuando la subí, creo que es de un día que acompañé a los Rolling Stones a escrachar la ciudad cuando eran una banda de Garage y la madre de Keith Richards nos traía el Toddy con Sonrisas en medio de los ensayos. Ay...que recuerdos...

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Friday, October 13, 2006

Vac tu de fiuter


¡No es lo que parece!...bueno si, me están dando por popa. Pero dejen que les cuente porque todavía no se bien que fue lo que pasó...

No sé si lo saben, pero esto para mí es terapéutico. Compartir los momentos más cruciales de mi vida con perfectos desconocidos me hace bien.

Esto fue un viernes creo, hará cosa de dos semanas. Caminaba yo por unas calles oscuras, rodeado de monoblocks y gente curiosa que hablaba en un extraño dialecto. Recuedo que luego de cada frase agregaban el sonido: “locoéh!”. Decían cosas como: “tenéunamonoda locoéh!?”, “sórrrregato locoeh!?” y cosas así. De repente empecé a sentir un miedo terrible y evadiendo aquella horrible situación me metí en una puerta que decía: “TRACTAC del Quico Estepario, circo anárquico imaginario”

“Guachiguagua!” pensé para mis adentros mientras atravesaba aquella puerta. Adentro estaba todavía más oscuro que afuera, pero al cerrar completamente la puerta se encendieron miles de tubos fluorescentes en lo que era una sala ridículamente enorme.

Comencé a recorrerla sin ver a nadie, cuando al cabo de un rato veo acercarse a lo lejos una figura humana. Era un hombre de blanco y con las canas revueltas, se presentó como el Dr Emmet Brown. Me dijo que tenía una importante misión para mí y me pidió que lo siguiera. Oquéi! Le dije.

Llegamos a una sala con una maquina re loca, estaba bárbara, llena de botonitos y palanquines re copantes! Me dijo: “¡metete ahí che!, yo la voy a ir prendiendo” y me señalo un compartimento con un asiento. “Bueno, viejo, pero, ¿qué es esto, que me va a hacer, que pretende usted de mi??”

El viejo se quedó callado y apretó algunos botones mientras se tocaba el ganso y ponía cara de: “¡Mah si!” al mover alguna de las palancas. “Preparate gil” me pareció oírle decir. “¿COMO??”, “No..nada...que te acomodes...”

La cosa es que me senté y empezó a temblar y a vibrar todo, era como si estuviera recibiendo una llamada REALMENTE IMPORTANTE a mi celular.

Entonces el viejo se agarró las partes, me hizo fákiu, se cagó de risa y apretó un botón rojo enorme que tenía la inscripción: “¡Que se pudra todo!”

El piso empezó a iluminarse y todo se volvió de colores, faltaba John Travolta y eso era Fiebre de Sábado por la noche. Cuando las luces y el ruido cesaron, me encontraba en un extraño pueblo. Un poco aturdido me bajé de la maquina y empecé a recorrer la zona. Me llamaron la atención las casas de piedra y los terodáctilos que volaban, pero fuera de eso, todo bien.

Caminé un rato y me encontré a un tipo en taparabos y con una especie de bate de baseball medio deforme. Me dijo que se llamaba Pedro y que picaba piedras. “Bueno, yo me llamo Federico”, y no le dije a que me dedicaba porque no me gusta hacerme el confianzudo con los extraños.

Bueno Federico, pasá por mi casa a tomar algo, y me contás de donde venís.

“Sali vale” le dije.

La casa era una roña, toda sucia, llena de polvo y con olor a bicho muerto. Un brontosaurio servía de tacho de basura. Me cagué todo y casí lo fajo a Pedro por no haberme avisado del bicho cuando fui a tirar el chicle que venía mascando.

La cuestión es que una cosa llevó a la otra, y cuando menos me lo esperaba Pedro me dijo: “Bueno, creo que te tocó el ocho” “¿Guot???” , le dije en perfecto inglés.

Pedro me golpeó con su bate y al parecer me dejó inconsciente. Porque desperté en mi casa y con mucho dolor de cabeza. En un principio pensé que todo había sido un mal sueño, y que nada de eso había pasado. Me estaba riendo pensando en lo ridículo de mi pesadilla, cuando encuentro un sobre con una carta que decía: “Gracias por una noche inolvidable, siempre tuyo, Peter” y esta foto junto a la carta.


Quico aconseja: Si tenés ropa que era de tu abuelo, no importa lo que te digan de la moda retro, vos tirala que debe tener polillas.

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Monday, October 09, 2006

La fiesta....¿que fiesta?


Bueno...este....que puedo decir a mi favor...

La verdad yo no quería ir a esa fiesta, pero la gente de Schneider insistió mucho con que mi imagen se estaba volviendo popular y que deseaban tenerme ahí. Parece que aparentemente quieren sabotear a Flavio Pedemonti y colocarme a mí al frente de la campaña. Yo solo les dije que Quico no es ningún menso, y que si no hay buena guita, esta carita privilegiada no sale en televisión otra vez, o se creen que estos cachetes perfectamente pulidos y lustrados los tiene cualquiera. La gente de Schneider me dijo que por ahora solo querían que vaya a esta fiesta y haga sociales con la High Society de la cerveza, que me rodee de vedettes y que tome tanta cerveza gratis como quiera. Ok...tampoco soy boludo.

Llegué a la fiesta temprano, Até el monopatín a un poste de luz con una cadena mientras Leo Montero y el otro ignoto que conducía gran hermano me miraban de reojo y se reían por lo bajo...al lado de él estaba la muerte, con una botella de Schneider en la mano...en serio. Les hice fákiu y entré a la fiesta.

Adentro la cerveza corría como el agua. Todo bien hasta que llegó el agua y se enojo por eso de que la estén imitando. “¡Nadie corre como yo!” gritó enfadada y huyó de la sala corriendo como loca. Yo agarré un vaso y serví mi primer medida. Parecía que estaba todo el mundo en esa fiesta. A eso de la una y medía cayó Alejandra Pradón, pero ya está bien. Luego entraron Susana Gimenez y el Corcho Rodriguez, a quien se veía un poco picado. También llegó Jorge Hane, el inventor del Reduce Fat Fast, y adivinen.....a quien tenía a su lado... “la modelo, Marcela Brane”. Guau..pensé emulando a un perro, esta va ser una larga noche. Luego llegaron los teletubbies, Guillermo Andino y la esposa. Después llegó Carlitox, que mientras se empomaba a la esposa de andino se excusaba diciendo que venía a flotar. También entró Charly García, y atrás venía Pipo fumándose un Tomahawck.

La música variaba entre Tom Petty, Los parchís, Dylan, Nicole Neumann, Oasis, El teto Medina (Live at Chacarita), The Smashing Pumpkins, Camilo de Intrusos, Setnova, Ricky Marvelous, The Smiths, Valeria Lynch, Islander, Etc.

Todo iba de pelos, pero la cerveza era mucha, demasiada quizás... la gente empezó a tomar más de la cuenta, y alrededor de las 6 a.m., la EKATOMBE:

El primer indicio que tuve de que todo acabaría en desastre fue al ver a un teletubbie abrazado al Corcho Rodriguez mientras gritaban: ¡Ay Susana Ay Susana Ay Susana, a vos si, que te gusta la banana! Luego veo a la esposa de Andino fumando brócoli con carlitox mientras Andino gritaba: “No...este peinado es recontra macho, ¡uds no entienden!" Y después salió llorando de la fiesta mientras la esposa y Carlitox se le cagaban de risa...

En otra punta de la fiesta Pipo Cipolatti vendía Cds de Los Twist por una birra mientras Charly y Susana Gimenez intimaban en los reservados. El alcohol era cada vez más y la fiesta se degeneraba a pasos agigantados. Todo me daba vueltas y enloquecí yo también. Empecé a caminar dando tumbos por la sala. Estaba totalmente ido. Me crucé a Marcela Brane que vendía el Reduce Fat Fast sin receta en un pasillo, y no lo pude contener, le grite:

“pero andá a lavarte el orto, si no te conocés ni vos!!! ¿Modelo??, ¿Con ese culo???”

Fue entonces cuando Jorge Hane se me vino al humo como una topadora, ahí nomás recordé a Karate Kid y le hice la grulla. El único problema fue que él me hizo el Mike Tyson y me cagó a piñas. Pero no se quedó así la cosa!! No señor!! Después me pegó mucho más!! Por suerte estaban los ejecutivos de Schneider que nos separaban mientras me decían: “No lo vale Quico, este canoso pelotudo no lo vale, no manches tu imagen por este salame” Pero yo estaba echo un Chasqui-Bum y me volví a abalanzar sobre el maldito portorriqueño para darle su merecido. Estaba a punto de partirle la madre cuando por el parlante sonó el Teto Medina Unplugged en emtiví, y todos corrimos a fajar al Disc Jockey. Pero el Disc Jockey era amigo de los teletubbies, y para que!!! Se pudrió todo, ¡el quilombo generalizado! Los teletubbies repartían de lo lindo, pero a nadie le gustan los teletubbies, y todos en la fiesta rodearon a los ¿cinco? Teletubbies con ganas de desquitarse por eso de “OA, OA”. Y se pudrió todo, volaban patadas, piñas, botellazos, vasos rotos, manuscritos de Kerouac, prótesis dentales, discos de los twist, cortes de res, pentiums cuatro, ejecutivos de Schneider, frascos de mostaneza. Todo volaba por el aire y el caos era total.

Salimos todos de allí golpeados y borrachos, nadie estaba en condiciones de manejar, así que como pudimos nos arrastramos hasta una remisería. El de la remisería vió llegar a un teletubbie abrazado a la Su. A Carlitox lo traían entre el Corcho Rodriguez y Pipo Cipolatti. El buen hombre nos fue subiendo a los autos como pudo. El problema es que la única que se acordaba donde vivía era la Su, así que fuimos todos en caravana hasta su casa y nos quedamos todos a dormir ahí, tirados en la cocina, el living, etc.

Me desperté al otro día con una extraña sensación, me olí la remera...

Jazmín me había meado.

Quico aconseja: Si te cambiaste de colegio, y tenés una cabeza enorme decí rápido que todos te llaman "Tigre".

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Querido diario...


Soy yo Quico. Si si el del chavo (¡la concha de tu madre!), me escapé de la vecindad. Basta de chavos y chilindrinas, basta de gente con apellidos como Barriga. Nadie que se apellide barriga puede venir a sacarme un peso, de la renta o de lo que carajo sea, ¡No es serio! Vos quedate por acá, Este es el diario donde voy a contar todo lo que me pasa fuera de la vecindad.

Esto es lo que pasa cuando un adolescente se va de casa.

QUICOAVENTURAS.
...y se va a la puta que lo parió.

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